Mi refugio

Primera Guerra Mundial – Parte 1
8 mayo 2019
El fruto del Espíritu
10 mayo 2019
Primera Guerra Mundial – Parte 1
8 mayo 2019
El fruto del Espíritu
10 mayo 2019

Lectura: Salmos 142:1 – 7

“…No tengo refugio, ni hay quien cuide mi vida” v. 4

Existe un video sobre los refugiados que llegaron a Europa, atravesando mares tempestuosos en barcas rebosando de personas; los que sobrevivían tendrían que sufrir lo que significa el adaptarse a otra cultura pues la suya propia sería un recuerdo. Había niños que no tenían ninguna opción que escoger. Tendrían que superar kilómetros de barreras más que cualquier otro niño de su edad. Pero ellos siempre llevarán impreso como parte de su piel, grabado en su corazón: “yo vi morir”, “yo vi cuando se llevaron a mi mamá, a mi papá, a mi hermano, a mi amiga y no pude hacer nada”.

Y a millares de kilómetros de distancia estamos nosotros. ¿Qué podemos hacer? Cada uno de esos hermanos y hermanas tienen las células curtidas de dolor. Eso será difícil de cambiar; pero para Dios nada es imposible. Que Dios los guarde en su camino de caer entre inescrupulosos que no tienen idea de lo que su vida ha sido para juzgarlos, tratarlos mal o aprovecharse de ellos.

La gente se pregunta: “¿Dónde estaba Dios en ese momento?”. Yo te lo digo: Él está en cada uno de los corazones de esos voluntarios que dan su tiempo y su vida para ayudarlos a llegar a salvo a las orilla, para buscarles vivienda, alimento y alguna ocupación, en los que tienen el corazón para enseñarles el idioma. En todos ellos, ahí está Dios.

En medio de todo este drama humano, Dios envía personas con amor y compasión para ayudar al que está sin refugio. Dios es “alto refugio”.

Nery de Tenorio, Estados Unidos

“…Dios mío, fortaleza mía, en Él confiaré… mi alto refugio”. Salmos 18:2
Meditación publicada en el libro devocional de RTM Alimento para el Alma – volumen 16, para conseguir una copia de la edición impresa visítenos en Soriano 1335 (Montevideo, Uruguay) o en su librería cristiana más cercana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *